Se da por sentado que a un escritor le cuesta muy poco cantar las sobradas bondades de los libros. Sin embargo, en estas páginas escribo como lector. Este volumen en concreto es un intento de indagar candorosamente en qué convierte un libro en mucho más que tinta sobre papel y en por qué leer es mucho más que un pasatiempo, un modo de entretenerse o un proceso de aprendizaje. Es un celebración de la cultura general que tan buenos ratos nos hace pasar
Un libro sobre libros y las experiencias que vivimos cuando los tenemos entre manos. 50 momentos entorno a la lectura que hemos vivido o deseado vivir, se despliegan como una sucesión de anécdotas seductoras que nos llevan a reflexionar sobre nuestras lecturas. Si obviamos el título que induce a la confusión con un libro de autoayuda, que en el fondo algo tiene pues toda lectura tiene algo o mucho de catarsis. Si obviamos la camisa cuya cubierta se convierte en la celebración de los 75 años de la editorial. Enhorabuena! Especialmente en tiempos tan adversos para la cultura y el papel. Si obviamos esta seducción, cruel dictadura del marketing, agradeceremos que el formato nos atraiga a esta lectura y a las experiencias sobre la lectura que nos va a mostrar.
El elenco de experiencias y rituales que todo lector puede vivir se inicia con las dedicatorias manuscritas en libros viejos, casi desaparecidas entre el mundo digital y la progresiva desaparición de la venta de segunda mano.
El elenco de experiencias y rituales que todo lector puede vivir se inicia con las dedicatorias manuscritas en libros viejos, casi desaparecidas entre el mundo digital y la progresiva desaparición de la venta de segunda mano.
En las librerías de viejo "Estos libreros no son nunca agobiantes y, desde luego, no servirían para agentes comerciales. Estos custodios de páginas están ahí para socorrernos si lo precisamos, con recomendaciones más perspicaces, originales y deliberadamente excéntricas que las que será capaz de realizar nunca ningún algoritmo informático en un sitio web".
Continua la lista con una confesión de curiosidad al inspeccionar las bibliotecas al visitar casas ajenas, el uso de marcapáginas improvisados y con reflexiones sobre bibliotecas, librerías, ... o cuando fingimos haber leído algo que no hemos leído. En algunos momentos nos sentimos plenamente identificados con el escritor-lector e incluso podemos aportar nuestros propios momentos de placer de nuestras lecturas. Pero dentro de estos 50 momentos en torno a la lectura más de uno nos sorprende, es el canto del cisne de un mundo que parece a punto de desaparecer, cuyo apocalipsis ha sido anunciado pero que como último soldado de la batalla parece resistir eternamente. Y es que en papel se presenta ante nosotros este placer número 49: "Notar que un libro está hecho para tí".
Sin embargo no puedo terminar sin citar el último de los placeres que no solo es mi favorito sino que se debe practicar no al terminar un libro sino en cada capítulo y en cada párrafo que se dirige a nosotros: "Terminar un libro, dejarlo sobre la mesa y reflexionar sobre él".
Continua la lista con una confesión de curiosidad al inspeccionar las bibliotecas al visitar casas ajenas, el uso de marcapáginas improvisados y con reflexiones sobre bibliotecas, librerías, ... o cuando fingimos haber leído algo que no hemos leído. En algunos momentos nos sentimos plenamente identificados con el escritor-lector e incluso podemos aportar nuestros propios momentos de placer de nuestras lecturas. Pero dentro de estos 50 momentos en torno a la lectura más de uno nos sorprende, es el canto del cisne de un mundo que parece a punto de desaparecer, cuyo apocalipsis ha sido anunciado pero que como último soldado de la batalla parece resistir eternamente. Y es que en papel se presenta ante nosotros este placer número 49: "Notar que un libro está hecho para tí".
Sin embargo no puedo terminar sin citar el último de los placeres que no solo es mi favorito sino que se debe practicar no al terminar un libro sino en cada capítulo y en cada párrafo que se dirige a nosotros: "Terminar un libro, dejarlo sobre la mesa y reflexionar sobre él".
Es "esta obra una carta de amor dirigida a los libros y a las librerías, a los amantes de los libros, a las muchas y a la vez universales formas de leer y a todas las delicias que sólo los buenos lectores conocen", que no te puedes perder si amas los libros, la lectura y su mundo.
Este libro te alegrará la vida. 50 placeres íntimos de la lectura.
Daniel Gray
Ariel. 2017
231 pág
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