Shenzen. Guy Delisle

Shenzhen, diciembre de 1997. Estoy de nuevo en China. Esta vez en el sur. La primera vez estuve en Nankín, al norte. Vuelvo a encontrar lo que había olvidado: los olores, la suciedad, el ambiente grisáceo. Me doy cuenta de que mi memoria no había retenido más que el lado bueno... el exotismo... Ya que, con el tiempo, que se encarga de borrar los malos momentos, la memoria guarda para siempre lo ingenuo y estúpidamente positivo. Durante tres meses viviré en un hotel, en una habitación idéntica a la que tuve entonces. De hecho, en China sólo hay un modelo de habitación.

Publicado originalmente en el año 2000 sobre su experiencia biográfica en China en 1997, llegó a España en 2013. Lo descubro después de haber disfrutado su excelente Pyongyang y amenas Crónicas Birmanas, por lo que ser objetivo va a ser difícil. En esa misma linea tanto gráfica como argumental recrea su experiencia vital en China como director de un estudio de animación, tres meses para terminar un proyecto y sobrevivir sin hablar chino. El choque cultural es inminente en cada escena, por lo que en vez de presenciar una mera serie de viñetas autobiográficas asistimos a un ruidoso proceso de psicoanálisis que deriva en el absurdo de la incomprensión. 

Deambulo tranquilamente y sin rumbo fijo por las calles de la ciudad esbozando una sonrisa beata. Hay mucho que ver. Elijo el trenecito de cremallera que lleva a los visitantes hasta lo alto de la isla. ¡El desnivel es de casi 45º! ¡Si falla, la caída no será larga! Clic, clac, clic clac. No hay salida de emergencia... Clic, clac, clic, clac... ¡Y las ventanas no se abren! Un ruido extraño. Lo sabía.. Tenía que haber ido al jardín botánico. Reaccionar. El tren acelera. Proyectados hacia delante. Sacudida. Fracción de segundo. Contra la banqueta. Aguantar el golpe. ¡Ahhh!
¿Por qué incluso en un momento tan plácido como éste mi imaginación se desboca y acapara mi mente con semejantes catástrofes? Y eso que creo que soy una persona positiva... Parece que menos de lo que pensaba.

Shenzen es un capítulo biográfico en clave de humor y honestidad en formato novela gráfica, que nos ofrece una lectura amena y sorprendente. Una oportunidad para descubrir la versatilidad de este género que con un trazado libre en blanco y negro permite convertir un capítulo descriptivo en una escena plenamente expresiva.

Shenzhen

Guy Delisle

Astiberri. 2013

148 pág.