Las chicas del alambre. Jordi Sierra i Fabra

Aquel día me dormí.

Había estado trabajando hasta tarde, terminando un artículo no demasiado brillante sobre la moratoria para la caza de ballenas y el hecho de que noruegos y japoneses se la pasaran por el forro cuando les convenía. Me caen bien las ballenas. Pero el problema es que cuando algo me afecta, pierdo la visión periodística, dejo de ser objetivo, tomo partido y entonces... acabo escribiendo panegíricos bastante densos. Ideales para los boletines informativos de Greenpeace o de Amnistía Internacional, pero no para una revista.

Aunque la dueña sea tu propia madre.

Jonathan trabaja en Z.I, Zonas Interiores, revista propiedad de su madre Paula Montornés. Como directora le encarga que investigué la desaparición hace diez años de Vania, modelo del grupo Wire-girls, chicas del alambre, llamadas así por su excesiva delgadez. Es el tiempo de los diseñadores de moda en busca de cuerpos andróginos carentes de vida y es el tiempo de adolescentes sometidas a la tiranía de las bajas calorías y las altas horas de trabajo.

  

--... Pero... presta atención a los pequeños detalles, a las palabras que no parecen importantes, a los nombres que salen y parecen pasar de largo, en un suspiro. No sé si me explico.

-- Como la letra pequeña de los contratos.
-- Exacto. En esa letra pequeña suele estar muchas veces el auténtico contrato.

Jordi Sierra i Fabra es un escritor prolífico que empezó a escribir en su infancia con una producción que abarca desde libros juveniles hasta novela policial pasando por poesía, biografías o ensayo musical, su gran pasión. Locutor de radio, director de revistas musicales y escritor, entre otras muchas facetas ha impulsado la creación de fundaciones en España y Colombia para el apoyo y promoción de escritores juveniles. Ha recibido numerosos premios y condecoraciones como el Cervantes chico y la Medalla al Mérito en Bellas Artes. Campos de fresas cuenta con 92 ediciones, siendo leído dentro de los planes de formación de escuelas de secundaria de nuestro país.

En 1998 Jordi Sierra i Fabra compone esta novela como una lección juvenil sobre el mundo de la moda y sus sombras. En ella se desliza un mundo competitivo moldeado por intereses, drogas, anorexia y bulimia. Se presenta con una escritura fluida y amena, de fácil lectura. Pero son los detalles los que como espejo de la belleza son sumamente perecederos y hacen que no madure, convirtiendo su lectura en un ejercicio de superficialidad.

Las chicas del alambre
Jordi Sierra i Fabra
Alfaguara. 1999
220 pág.
ISBN 84-204-4915-6