Divina Lola. Cristina Morató

Habían pasado trece años desde que se despidió de ella por última vez y, sin embargo, la noticia de su muerte le afectó profundamente. En todo ese tiempo el rey Luis I de Baviera no había podido olvidar a su amada Lola Montes, la hermosa bailarina española que una soleada mañana de otoño irrumpió como un torbellino en su gabinete de palacio.

Así se inicia la biografía de Eliza Gilbert, quien se presentaba como Lola Montes, bailarina española hija de nobles, cuando en realidad había nacido en Escocia y había pasado su infancia en la India. Sus dotes como bailarina eran valorados más por la picardía y exhibición que por técnica y arte, para ella lo importante es el éxito que le permite llevar una vida de lujo que ansia. Desde el teatro a la nobleza como amante de nobles y del rey Luis I, envuelta en escándalos huye de ciudad en ciudad rehaciendo su vida perseguida por deudores.

El rey sufría en silencio al ver que Lola no se comportaba en público como una dama de su posición. Salía sola a pasear, invitaba a jóvenes estudiantes a su casa, perdía los modales con facilidad, y gritaba o blasfemaba sin importarle lo que la gente pudiera pensar.

Eliza Gilbert sufre ante el modelo social que le impone la buena sociedad y la condena a llevar una vida de sumisión por lo que se rebela en una espiral de libertad que la destierra sucesivamente de la sociedad.
Cristina Morato reconstruye su vida en un empalagoso relato de romance y aventuras, excesivo en páginas y ambientaciones que se alejan de una biografía rigurosa.



Divina Lola
Cristina Morató
Plaza Janés. 2017
573 pág.
ISBN  978-84-01-34805-1

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