En el nombre del hijo. Donna Leon

—Ya sabes que no me gusta entrometerme —le dijo el conte Falier a Brunetti—. Pero, dado que se trata de alguien cercano a mí, creo que no tengo alternativa. Brunetti, que estaba sentado frente a su suegro en uno de los suntuosos sillones que llenaban el palazzo Falier, llevaba un rato escuchando al conte, consciente de lo que estaba costándole arrancar un relato que, a todas luces, quería que Brunetti conociese.
Lo había llamado esa misma mañana y le había preguntado si por la tarde, cuando fuese de camino a casa, tendría tiempo de pasar a tomar algo con él. Quería hacerle una consulta. La primera reacción del yerno, ya que se trataba de un día cálido de principios de primavera, había sido calcular la manera más fácil de ir a pie entre la questura y el palazzo sin quedar atrapado en ninguna de las rutas migratorias de los rebaños de turistas que a esas alturas de año ya eran habituales.

El comisario Guido Brunetti recibe la llamada de su suegro, desea realizarle una consulta. Durante la conversación descubre la preocupación del conte Falier respecto a su amigo Gonzalo Rodríguez de Tejada que a sus ochenta años afortunados económicamente ha decidido adoptar a un joven... de cuarenta años. Brunetti no sabe decir que no e inicia con discreción una investigación sobre el carácter y motivación del joven con el deseo de satisfacer a su suegro y proteger al amigo de la familia y padrino de su esposa Paola.
Sturmtruppen, Las Troyanas... mientras el comisario Brunetti investiga y descubre al asesino, lee, clásicos y modernos, y reflexiona sobre el ser humano.

Cerró el libro y lo dejo a un lado. Paola siempre insistía en lo vital que era leer a los clásicos, proque estos usaban un lenguaje bonito para hablarnos de cosas importantes.

Ya son 28 novelas del comisario nacido en los años 90 de la mano de Donna Leon, estadounidense afincada durante muchos años en Venecia cuya obra por decisión propia no se traduce al italiano. Es un lujo que podamos acceder a un ritmo íntimo de novela negra asentado en la descripción de la sociedad veneciana y de la familia aristocrática Falier, mientras pincela un país, Italia, de autos blu, favores, clientelismo y ocasiones perdidas. El mérito de sus obras se basa en una aparente sencillez, son tramas previsibles protagonizadas por la naturaleza humana y reflexiones sutiles cuya mera exposición son denuncia social.

En el nombre del hijo
Donna Leon
Seix Barral. 2019
312 pág.
ISBN 9788432234811